Son una pieza clave para garantizar la comodidad y prevención de úlceras por presión en pacientes hospitalizados o en cuidados prolongados. Diseñados con materiales de alta calidad y tecnologías avanzadas, como espumas viscoelásticas, aire alternante o gel, ofrecen soporte ergonómico y alivio de puntos de presión. Disponibles en modelos estándar, antiescaras o bariátricos, son fáciles de limpiar, duraderos y adaptables a diversas necesidades clínicas, mejorando la calidad de vida del paciente.